viernes, 13 de noviembre de 2009

EL SILENCIO HABLA

Pirámides de amargura se construyen en mi pensamiento
Nada tiene sentido; la vida pasa y con ella se va mi aliento
¿Dónde está aquel hechizo, palabras sin consentimiento?
Será que se marcharon todos con el viento
No tengo refugio mis manos se han callado
Mudo es mi pensar; No puedo caminar.
paralítico es mi hablar, mis manos tienen que callar
no hay mas, solo al azar.....
un laberinto de ideas sin sentido,

Mi corazón ha acaecido.
Si mis manos no pueden gritar,
Mi garganta no hace mas que llorar.
Pirámides en mi cabeza van creciendo
Amarguras que se van construyendo.
Saca el arma y sin pensarlo dispara, matando así todo el dolor que trae dentro.
Desde niña callo y observo lo que a su alrededor pasaba, nunca supo que decir o como reaccionar por decisión propia, vivía en un escenario de apariencias, sin virtudes, donde solo contaba el “guión” que se le había dado a “actuar”.
Su respiración era lo único que tenia propio, las bambalinas habían sido armadas desde antes de nacer, le impusieron sus hábitos, gustos, costumbres; Mas no pudieron tocar sus pensamientos, y como todo se le fue impuesto no tuvo otro remedio que aprender el arte actoral, convirtiéndose en una actriz de lujo.
El destino se encargo de recordarle a cada momento su triste porvenir, la sonrisa en sus labios, señal de indiferencia. Pero un disparo acabo con el dolor que tenia guardado en su alma, dándole alivio a su amargo vivir.
Ella no era así; murmuraban los que la conocían,
Un disparo retumbó el lugar, aquella niña callada, la cual estaba acostumbrada a obedecer y a aceptar lo que se le imponiera había acabado con ese silencio hablado, había sacado el arma más poderosa que tenia y con un disparo acabo su pasado.
Solo se oyó un poderoso grito y un derramar de letras desbordaron de su ser, había terminado su infelicidad..... esa actuación llegó a su final; murió
Por fin habló, con el arma más poderosa que se pudieron imaginar, disparó con sus escritos, dejando de lado el pasado y comenzando el presente, sin actuación, sin mascaras, solo con la verdad SU verdad en habla. No hay arma más poderosa que la escritura se dijo, al fin agonizo su actuación y renació a la vida.